Primero piense, tanto usted como su bebé, tienen que adaptarse a una nueva situación. Tiene que hacer que la familia huela, los ruidos... el tuyo... y tienes que ser "lo suficientemente inteligente", para que la llegada de esta "delgadez" no modifiques tu serenidad, tu "templanza". Trata de organizarte poco a poco. Si logras programar toda una estrategia de batalla, es posible que salgas victorioso y muy airoso de combate. ¡ no fallan los espíritus! La depresión posparto debe ser tu amigo, pero no tu amigo; tienes que hacerlo...

En segundo lugar, le recomiendo que Reserve en su entorno a todos los concejales de la ciudad (llamados abuelas, políticas de madres, suegros, cunyades, vecinos, etc.) que, con el deseo de darte una mano de ayuda, lo que hacen es poner tus neuronas, nervio, pasando por ti para ser un chica inteligente una chica completamente "forassenyada". ¿Cree usted que su mejor asesor técnico y entrenador de fitness, en tales circunstancias de angustia, es su pediatra.

Tercero, no olvides lo que "tu" no fue una enfermedad, pero, como dijo nuestro rebesàvies, un regalo del cielo; Por lo tanto, que el período de "convalecencia" debe convertirse en un "post-vacaciones", después de lo cual será más fácil volver al trabajo. Prohibido a las delegaciones de nuestras obligaciones a nuestros tutores (nuestra madre, nuestra madre, abuelas u otras voluntarioses).

Cuarto, no debes dejar fuera que tienes que trabajar para recuperar tu esbelta figura... o no tan delgada. Recuerde que tan importante es la salud de su hijo como usted se siente bien, tanto interna como externamente. Si es preciso, organiza un horario para ir a un gimnasio (aunque tu vocación con el arte del perdessis abdominal antes de hacer tu primera comunión!).

En quinto lugar, recuerda que tu lado es tu compañero en este "trabajo duro nuevo", no puedes descuidar su capacidad es igual o mejor que tu (bueno, a veces). Ríndete a sus encantos y déjate sentir lo que significa ser padre... No desespere si se retira el primer intento. Seguramente se le presentará una segunda oportunidad. Eso es por la noche cuando suena desgarrador grito de tu "sucesor". No eres el único responsable del resultado de tu amor...

En sexto y último lugar, sólo recuerda que tu hijo será el reflejo de todas tus preocupaciones... y para ello somos nosotros, pediatras.
Siempre cuidaremos de sus hijos.